Una visita imperdible de las múltiples con las que cuenta París, la ciudad capital de Francia, es el denominado Moulin Rouge. Se trata nada más ni nada menos que del cabaret de mayor renombre en todo el mundo, el cual se constituyó como la sede del nacimiento del famoso can-can francés. Es por esta razón que este rincón parisino tiene una gran importancia tanto en la ciudad como en el país, sin dejar de mencionar que este establecimiento fue inmortalizado en las obras de arte de Toulouse-Lautrec, el célebre pintor que se dedicó a reflejar en sus pinturas la vida nocturna de la capital de Francia de finales de siglo XIX.

El cabaret en cuestión nació en el año 1889, de la mano de dos importantes hombres de negocios, llamados Joseph Oller y Charles Zidler. Fue emplazado en un sitio estratégico: el barrio de Montmarte. En ese entonces, dicho suburbio estaba de moda, ya que allí se reunían a beber una gran cantidad de hombres y era posible encontrar numerosas prostitutas. Es fundamental tener en cuenta que en sus comienzos al moulin rouge sólo asistía gente del pueblo, pero con el correr de los años también empezaron a concurrir individuos pertenecientes a la aristocracia.

Si tienes la oportunidad de conocer París, no dudes en acudir a un espectáculo en el Moulin Rouge. Allí es posible apreciar el show denominado Feerie, en el que participan un grupo de cien artistas, que incluye a las «Doriss Girls» (bailarinas reclutadas de todas partes del mundo). También participan de la función músicos y coristas, sin dejar de hacer hincapié a la maravillosa arquitectura del lugar, los fantásticos trajes, los suntuosos decorados y el sobresaliente acuario.

Fuente: Foto

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.