Francia es conocida por sus castillos, su gastronomía, sus campos de lavanda y, por supuesto, por sus encantadores pueblos medievales. A lo largo del país, especialmente en regiones como Occitania, Provenza o Alsacia, se encuentran joyas arquitectónicas que transportan a otra época. Aquí te presentamos una selección de diez pueblos medievales en Francia que parecen sacados de un cuento de hadas.
1. Carcassonne (Occitania)
Uno de los ejemplos más impresionantes de arquitectura medieval en Europa. Carcassonne es una ciudad amurallada que ha sido completamente restaurada y es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Sus torres puntiagudas, murallas dobles y callejuelas empedradas te harán sentir dentro de una película de fantasía.
2. Eguisheim (Alsacia)
Eguisheim es un pequeño pueblo circular, famoso por sus casas con entramado de madera y balcones floridos. Es uno de los más bellos de Alsacia y ha sido catalogado como uno de los «Pueblos más bellos de Francia». Su aire de cuento lo convierte en un destino muy popular, especialmente durante la temporada navideña.
3. Pérouges (Auvernia-Ródano-Alpes)
Situado cerca de Lyon, Pérouges es un ejemplo perfecto de pueblo medieval conservado. Sus calles de adoquines, casas de piedra y plazas tranquilas parecen no haber cambiado en siglos. Además, es famoso por su galette de Pérouges, una especie de tarta dulce deliciosa.
4. Rocamadour (Occitania)
Rocamadour es un destino de peregrinación desde la Edad Media. Este pueblo está literalmente colgado de un acantilado sobre el río Alzou, y sus casas y santuarios están integrados en la roca. Visitarlo es una experiencia espiritual y estética inolvidable.
5. Saint-Cirq-Lapopie (Occitania)
Nombrado como el pueblo favorito de los franceses en 2012, Saint-Cirq-Lapopie se encuentra suspendido sobre el río Lot. Sus calles adoquinadas, casas medievales de tejados rojos y vistas impresionantes lo convierten en una parada obligatoria para los amantes de la historia y la belleza.
6. Colmar (Alsacia)
Aunque es más una pequeña ciudad que un pueblo, Colmar en Francia merece estar en esta lista por su conservación medieval y su atmósfera de cuento. Con canales, casas de colores y flores por todas partes, es especialmente mágica durante el mercado navideño.
7. Domme (Nueva Aquitania)
Este bastión medieval se encuentra en lo alto de un acantilado con vistas al río Dordoña. Fundado como bastida en el siglo XIII, Domme conserva puertas fortificadas, murallas y un trazado urbano típico de la Edad Media. Sus vistas panorámicas son inolvidables.
8. Les Baux-de-Provence (Provenza-Alpes-Costa Azul)
Situado en lo alto de una colina en el corazón de la Provenza, este pueblo ofrece ruinas de un castillo medieval y calles empedradas que serpentean entre casas de piedra. Es una mezcla perfecta entre historia y naturaleza, rodeado de olivares y campos de lavanda.
9. Conques (Occitania)
Conques es una joya escondida en el valle del Dourdou. Es uno de los lugares más importantes del Camino de Santiago en Francia y alberga la magnífica abadía de Sainte-Foy, un ejemplo del románico francés. Sus calles empinadas y su aire sagrado te transportan a otra era.
10. Yvoire (Auvernia-Ródano-Alpes)
A orillas del lago Lemán, Yvoire combina el encanto medieval con paisajes lacustres. El pueblo ha sido cuidadosamente restaurado y está lleno de flores en verano. Sus calles peatonales, torres defensivas y jardines medievales lo hacen perfecto para una escapada romántica.
Estos pueblos medievales no solo conservan su arquitectura y trazado original, sino también una atmósfera que parece resistirse al paso del tiempo. Visitar cualquiera de ellos es como abrir una ventana a la historia viva de Francia, rodeada de belleza natural, buena comida y una tranquilidad que solo se encuentra en los lugares con alma.
