Con unos 240 kilómetros de extensión que van desde Mardeillan hasta Toulouse el Canal du Midi representa una gran parte del turismo fluvial de Francia. En su vasto recorrido regala a sus visitante diversas obras de arte que han sido levantadas en sus orillas.
Por todas estas razones ha sido declarado en el año 1996 Patrimonio de la Humanidad. Este bello canal se encuentra al sur de Francia en la región del Mediodía Francés y la unión del río Garona con el Mar Mediterráneo, permitiendo la navegación desde el Mediterráneo hasta su llegada al Atlántico.
En épocas antiguas ya había sido pensado por grandes figuras como Nerón, Carlo Magno y Enrique IV y fue hecho realidad por Luis XIV entre los años 1666 y 1681, como una forma de custodiar los barcos y mercaderías transportadas ya que todo este tráfico se realizaría dentro de los límites del país, sin pasar por el Estrecho de Gibraltar.
En su construcción trabajaron más de diez mil obreros y fue inaugurado oficialmente en 1681. Sin embargo, los constantes cambios en la economía de la zona sumados a la llegada del tren y las carreteras le pusieron freno al desarrollo económico del canal y un siglo después se lo destinó para uso exclusivo del turismo.
En la actualidad no es el comercio sino el turismo la actividad más desarrollada en el canal, a través de distintos barcos que llevando visitantes pasean por su cauce siendo también utilizado por los aficionados al remo.
Son muy populares las actividades como patinaje, cicloturismo y hasta senderismo que se llevan a cabo a lo largo de toda su extensión.
Es bonito ver como muchas barcas antiguas fueron transformadas y convertidas en salas de espectáculos, comercios, salones de exposiciones y hasta viviendas.
Entre las obras que fueron construidas a todo lo largo del canal se encuentran el puente del Canal sobre el Orb, el túne de Malpas y las exclusas de Fonséranes y Castelnaudary.
Para el desarrollo del turismo también se implementaron varios barcos-restaurantes que recorren la zona, ampliando además la oferta de restaurantes y atrayendo así mayor cantidad de visitantes que buscan revivir la época de oro de este hermoso sitio.
Un paseo que vale la pena realizar, rodeado de bellos paisajes y obras de arte magníficas.
Foto: Fuente French hotel barge